Intentamos hacer una simbiosis entre los procesos y la forma espacial de una obra. Estos pueden ser de diversos tipos: productivos si se trata de una factoría, diagrama de flujos de personas y transporte en una terminal o esquemas de fluidos y niveles en una desaladora.
La propia arquitectura aumenta la complejidad y desarrolla ideas cada vez más simples, ese es nuestro trabajo como arquitectos.
Los proyectos de infraestructuras han sido muy estimulantes y un punto de encuentro con otras disciplinas. Hoy es una nueva forma de hacer adaptada a un nuevo contexto global y sin embargo, para nosotros, un campo experimentado desde hace más de 20 años.