El proyecto de la desaladora del Área Metropolitana de Barcelona está formado por dos piezas arquitectónicas: el Edificio de Ósmosis Inversa y el Edificio de Control. Un especial cuidado de la calidad arquitectónica de ambos edificios los integran visual, acústica y ambientalmente al entorno, con una clara vocación de prestar un servicio con medios desarrollados con alta tecnología.
El espacio libre frente al acceso de la planta, en la que se sitúa la zona de aparcamiento se ha tratado con una expresa voluntad de enmarcar ambos edificios.
El diseño de la fachada del Edificio de Ósmosis Inversa que organiza y conforma el nuevo edificio de la desaladora se generó a partir del tratamiento digital de una fotografía. Aparece así un paisaje artificial que evoca la líquida naturaleza del agua. Esta nueva fachada esta punteada de pequeños orificios circulares cuya distribución permite el paso de más o menos luz a la nave de ósmosis.
[localización] El Prat de Llobregat, Barcelona
[fecha inicio] 2006
[fecha final] 2006
[superficie edificio control-laboratorios] 1.725,00m2
[superficie edificio osmosis inversa] 6.142,08m2
[superficie espacio público]
[arquitecto] Bogdanov Arquitectes
[colaborador] Patricio Aquilés, Arquitecto
Promociona, desarrolla y explota plantas de tratamiento de agua, especialmente en el negocio de la desalación.
El Edificio de Control ha sido concebido de aluminio reciclado de color azul marino por tratarse de agua de mar la que se desala. Los materiales de las fachadas son Aluminio y vidrio, todo en color azul marino. Un gran espacio abierto, une de forma secuencial los edificios del conjunto.